El manual interno es una potente herramienta de gestión que está al alcance de todo tipo de asesorías, dado que puede ser más o menos complejo. Podemos encontrar desde aquél que contiene cuatro normas básicas, hasta el más elaborado. Las ventajas que reporta son innegables, pues no sólo contribuye a mejorar los procesos internos, sino también a ordenar un poco las propias ideas. Todo despacho, sea pequeño o mediano, debería tener un Manuel interno.