Lo que debe retener…
Cada año debemos intentar sorprender y saber más de nuestro cliente y de su sector. Esta es el único camino posible para no perder al cliente y tener un retorno asegurado y continuo año tras año.
De todas formas, si estamos hablando de clientes que pagan una cuota pequeña, a veces puede no salir a cuenta esta forma de mantenerlos, pues es proporcionalmente demasiado cara. En estos casos puede ser suficiente hacer llamadas mensuales y reunirse dos o tres veces al año. Sin embargo, no podemos olvidar que las buenas visitas de mantenimiento pueden acabar proporcionando ventas cruzadas. Es decir, puede conseguirse que el cliente solicite nuevos servicios.
Nuestro consejo…
Una forma de ser sistemáticos en este tipo de visitas puede ser elaborando un calendario de visitas, en el que, atendiendo a la facturación que supone cada cliente para la firma o al tipo de relación que se establezca con él, se proyecten al año un número de visitas determinadas, y que el cliente sea conocedor de ese calendario.