Una vez se tienen claro estos objetivos, el siguiente paso sería decidir y analizar qué tipo de necesidades demandan nuestros clientes. Es decir el servicio que el cliente desea o necesita que se le ofrezca , visto desde otro punto de vista, el tipo de problemas que plantea al despacho.
Las diferentes problemáticas o necesidades que los clientes suelen plantear a un despacho se pueden clasificar en tres grandes grupos;
- Problemas complejos
- Problemas de supervisión y seguimiento
- Problemas de puro tramite
¿Qué tipo de servicios queremos ofrecer en el futuro?
Para responder a esta pregunta estaría bien reflexionar sobre las siguientes cuestiones:
- Los problemas complejos o de pericia son muy complejos y van más allá de los conocimientos profesionales y técnicos. Para resolverlos se requiere creatividad, innovación y una gran capacidad de reacción ante los imprevistos.
Por ejemplo: un despacho de abogados que se ha especializado en asesorar a empresas en crisis o con dificultades financieras, pues bien los profesionales de este despacho deberán saber cubrir varias especialidades y trabajar en equipo, aportando una solución global y coordinada que deberá cubrir diferentes especialidades; Consultoría en recursos humanos, Derecho laboral, Derecho mercantil/ Concursal, Fiscalidad, Finanzas, Corporate y búsqueda o negociación de recursos financieros.
Este tipo de problemáticas, como puede adivinar el lector, requerirá contar con profesionales dotados de mucha “creatividad jurídica y operativa”, evidentemente limitada por el ordenamiento y la ética profesional.
Un despacho que trabaje principalmente en este tipo de servicios posiblemente sea el que más se acerca al mundo de la consultoría.
- Los problemas de supervisión, experiencia o de recurrencia no suponen ni situaciones nuevas ni, por tanto, soluciones nuevas.. En este caso, serán los despachos con mayor experiencia los que podrán resolverlos mejor. Se trata de resolver situaciones “clásicas” que el cliente demanda por ejemplo en el asesoramiento fiscal o laboral continuado a lo largo del año. Es decir el cliente busca seguridad y confianza en unos servicios ya muy maduros, pero a la vez críticos, donde los años y el prestigio tienen su peso o influencia.
Un despacho que con los años se haya posicionado en este tipo de servicios posiblemente sea el más se acerca al mundo de la asesoría. - En cuanto a los problemas de trámite o de eficacia son básicamente de procedimiento. Tanto el problema mismo como los procedimientos para resolverlos ya son muy conocidos. En este caso, el cliente busca una empresa que resuelva su problema de una forma rápida, segura y a un precio muy competitivo.
Ejemplo: Una gestoría especializada en realizar y presentar las declaraciones de IVA, IRPF de empresarios en módulos. En este caso, la rapidez en la prestación de los servicios y los precios competitivos serán sus mejores armas.
Este tipo de despachos son los que claramente están en el mundo de la pura gestión, y donde la amenaza de los precios y los servicios de lowcost por internet es más evidente.
Sacar conclusiones..
Hasta aquí, las recomendaciones o camino a seguir parecen más o menos sencillos. Pero no todas las organizaciones tienen muy claro a qué necesidades responden, o a cuáles pueden o quieren responder y/o competir, y esta indefinición repercute negativamente en muchos aspectos. Así, por ejemplo, puede ser la causa del fracaso de muchísimos proyectos de planificación estratégica y de marketing. Para evitar esta situación, las empresas deben decidir primero qué tipo de necesidad del cliente quieren satisfacer, y después deben alinear una organización que se adapte a esta decisión o plan estratégico.
Un supuesto extremo de indefinición puede ser el de una asesoría que, para hacer frente a la fuerte competencia, quiera abarcarlo todo, respondiendo o pretendiendo responder a los tres problemas enumerados. Sin embargo, siempre, según nuestra experiencia, intentar abarcar tantos frentes resulta casi imposible, pues cada uno de ellos exige una estructura empresarial distinta.
La ultima parte del año, es una buena época para reflexionar y tomar decisiones.
Les esperamos en septiembre!!