Despachos individuales
- ¿Tiene claro sus objetivos a conseguir en su actividad profesional?
- ¿Estos objetivos los fija unilateralmente el titular, o de lo contrario han sido fijados con la participación de todos?
- ¿Se encuentra su despacho suficientemente dimensionado como para ofrecer el mejor servicio a sus clientes?
- ¿Se dan puntas de sierra en momentos y épocas concretos? ¿Siente que en muchas ocasiones no llega a todo, y que los acontecimientos, prisas y tensiones le desbordan, impidiéndole realizar los trabajos en la atención y rigor que debiera?
- Si es usted el titular, ¿Se ha visto tentado a colgar la toalla y trabajar por cuenta ajena? ¿Se ha planteado la necesidad de reorientar su trabajo, bien hacia áreas o productos con menos tensión, o bien asociándose con otros colaboradores para compartir los trabajos?
- ¿Está satisfecho con la rentabilidad que obtiene de su trabajo? ¿Conoce en cada momento el tiempo que factura sus horas a sus clientes? Si es así, ¿le compensa?
- ¿Es consciente de las incertidumbres, tanto de mercado como profesionales que existen en su entorno? ¿Tiene previsto un plan que abarque un plazo mínimo de dos o tres años?
- ¿Dispone de sistemas propios que le permitan controlar no sólo su trabajo sino la gestión económica de su despacho? ¿Dispone de una contabilidad mensual? ¿Sabe a la perfección lo que le deben sus clientes?¿Conoce la rentabilidad de sus clientes?
- ¿Qué porcentaje de tiempo le dedica a planificar y pensar su trabajo como negocio?
- ¿Adopta frecuentemente medidas tendentes a reducir los tiempos invertidos en los trabajos?
Firmas de más de un socio
- ¿Es el concepto de gestión, un término habitual en la firma?
- ¿Se disponen de políticas y objetivos que definen a la firma?
- En caso afirmativo,
- ¿Han sido consensuados estos objetivos entre los diferentes socios?
- ¿Se mide el grado de cumplimentación de los objetivos?
- ¿Son lo suficientemente flexibles para acomodarlos a las situaciones cambiantes que el mercado puede exigir en cada momento?
- ¿Se realizan reuniones periódicas dentro de la firma con los socios para informar, seguir e incluso exigir responsabilidades respecto a la cumplimentación de objetivos?
- ¿Se informa de alguna manera a los empleados de la firma respecto a los resultados de la misma?
- ¿Existe un sistema fluido de información hacia los socios? ¿De qué forma participan éstos en la gestión de la asesoría?
- De los socios integrantes, ¿trabajan todos ellos y con la misma dedicación en la firma? ¿Existen socios capitalistas?
- ¿Está adecuadamente dimensionada su asesoría para atender los compromisos de asesoría adquiridos con los clientes durante los próximos ejercicios?
- ¿Se dispone de mecanismos de seguimiento y control de trabajos?
- ¿El responsable de la asesoría actúa como director de orquesta o como mero firmón de talones y documentos más o menos oficiales?
- ¿Qué calificación daría al clima existente en su firma?
- En cuanto a relaciones entre los socios.
- Respecto al personal empleado.
- En relación con sus clientes.
- ¿Se encuentran las funciones suficientemente definidas dentro de los niveles de responsabilidad entre las de carácter técnico y las de gestión?
- ¿Se concede importancia a la gestión de la firma o se las considera como labores de despacho frente a las de campo?
- ¿Se asume que la firma “produce” y “vende” “horas” a clientes? En caso afirmativo, ¿se disponen de sistemas y se adoptan medidas para rentabilizar estas horas?
CONCLUSIÓN
De cuanto venimos diciendo podemos deducir lo siguiente:
- La importancia de establecer, medir y controlar los objetivos para la buena gestión de una firma.
- La buena comunicación es básica para todo, tanto la que se establece con el exterior como internamente.
- Es fundamental distribuir correctamente las funciones, y que estén perfectamente definidas.
- La buena gestión de la información cada vez se la valora más.
- Hay que ser conscientes de la buena gestión del tiempo.